El Puerto de Bilbao cierra una temporada récord de cruceristas.
En 2018, la terminal de cruceros que el Puerto de Bilbao tiene en Getxo recibió, por primera vez, cerca de 86.500 pasajeros (2.800 más que en 2017). De estos turistas, más de 3.000 iniciaron o finalizaron su crucero aquí y, para el resto, Getxo era una escala de un itinerario que les llevaba por ciudades del norte de Europa, principalmente. El número de escalas ascendió a 59, con esloras entre 68 y 339 metros; y siete de ellos hicieron noche en el puerto. En total, escalaron16 compañías. Por nacionalidades, predominan los británicos (46%), alemanes (20%) y estadounidenses (15%).
La Autoridad Portuaria de Bilbao se muestra muy satisfecha por el desarrollo de esta temporada, que confirma la posición del Puerto de Bilbao para afianzarse como puerto base (futuro turnarround port). Destaca, por un lado, el aumento de turistas, “porque más importante que el número de escalas es el número de pasajeros que llegan en los cruceros”. Por otra parte, señala el hecho de que se haya diversificado y ampliado las nacionalidades de los cruceristas y, en este sentido, remarca el repunte de los alemanes, cuyo gasto medio es superior, que han pasado de representar el 9% a ser el 20%. Y, por último, considera muy significativo que cada temporada aumente el número de cruceros que deciden hacer noche antes de continuar su itinerario.
Veinticinco navieras apuestan por Bilbao
Entre las navieras que apuestan por Bizkaia como destino de cruceros se encuentran muchas de las más prestigiosas del sector como: Azamara, Celebriyy Cruises, Cunard Line, Crystal, Fred Olsen, Hapag Lloyd, Hurtigruten, Majestic International, Marella Cr., MSC, Noble Caledonia, Norwegian, Oceania, Ponant, Pullmantur, Princess Cruises, P&O, Royal Caribbean Cruises Ltd (RCCL), Saga Cruises, Seabourn, Sea Cloud, SilverSea Cruises, Thomson, TUI Cruises y Wind Star.
Infraestructuras específicas para cruceros
El Puerto de Bilbao cuenta, en Getxo, con dos muelles exclusivos, cada uno con una estación marítima, alejados de los muelles comerciales. La última estación marítima, Olatua, se encuentra a la vanguardia de las europeas por su diseño, llevado a cabo tras un exhaustivo estudio y análisis de las demandas funcionales de este tipo de edificios; por los datos y opiniones aportadas por las grandes navieras operadores de cruceros que han sido atendidos; y por sus altos estándares de calidad y seguridad marítima.
Esta estación ha permitido, sobre todo, mejorar el servicio y la operativa de embarque y desembarque, un aspecto clave para los puertos que quieren, como Bilbao, crecer como puerto base. El edificio está concebido como un gran contenedor acristalado, y se abre hacia los buques para facilitar las maniobras de embarque y desembarque, y garantizar la comodidad de los viajeros.
La terminal, además de convertirse en un referente y permitir impulsar el tráfico de cruceros, cuenta con un amplio aparcamiento al aire libre, y está a disposición de entidades públicas o privadas para acoger todo tipo de actividades empresariales o sociales.
Texto y fotos: Autoridad Portuaria