El recién publicado cómic Joaquín Sabina. Pasión y vida (Vol. 1) nos plasma en viñetas la vida del universal artista de Úbeda, un formato que muestra al cantante como nunca antes lo habíamos visto. Es esta, pues, una biografía necesaria que completa los diferentes prismas desde donde ha sido retratado Sabina. Nadie había contado su prolífica vida en cómic hasta ahora.
Llega este libro en el justo momento en que Sabina anuncia que se retira de los grandes escenarios. Lo hace tras recorrer durante casi dos años España y América entera, colgando en todos los inconmensurables recintos el cartel de “Entradas agotadas”.
El lustroso libro de tapa dura, con guion de Kike Babas y Kike Turrón, que se lanzan a este proyecto tras haber publicado los cómics de El Gran Wyoming y Fito Cabrales, arranca en el sur de España, cuando nace Joaquín Ramón Martínez Sabina —hijo de comisario y ama de casa— en el crudo invierno de 1949.
Se retratan los pormenores de su infancia y adolescencia, momentos en que la poesía proscrita (por ejemplo, Lorca) llamará su atención y despertará su curiosidad. También se cuentan los apasionados romances de aquellos años de estudiante en Úbeda, quedando claro que se entregaba con alma y pasión a ambas cosas. Es en esa época cuando le regalan su primera guitarra y, fugazmente, se une como guitarrista a la formación The Merry Youngs.
Posteriormente, en la universidad de Granada, descubre la música de Bob Dylan y a escritores como Neruda o César Vallejo, y aquello lo cambia todo. Más se transforma todo en su vida cuando se ve en la obligación de exiliarse a Londres, tras participar activamente contra la represión de aquellos años 70, arrojando un cóctel molotov contra una sucursal bancaria.
Los guionistas plasman a la perfección lo que fue para un emigrante del sur de España llegar a aquella capital, donde el rock emergía por todos los rincones, una ciudad donde la libertad era el aire que se respiraba. La escucha obsesiva de los discos de Leonard Cohen o Dylan en una okupa londinense. También nos encontramos con un Sabina recibiendo y apoyando a otros exiliados, organizando recitales solidarios, a los que poco a poco se une con su guitarra y sus versiones de Paco Ibáñez, Violeta Parra o Atahualpa Yupanqui. Es por aquel entonces cuando empieza a pergeñar sus propias canciones y publica su primer libro de poemas, Memoria del exilio (1976). Tal y como nos cuenta el cómic Joaquín Sabina. Pasión y vida, aún le queda mucho que aprender y mucho que vivir.
Muerto Franco, en mitad de los 70, el artista en ciernes regresa al país y se instala en Madrid. Recién llegado, le toca hacer la mili. En el sorteo, le sale Mallorca. Al cabo de un año, publica su primer disco, Inventario (1978), del que reniega abiertamente al poco de publicarse, ya que no le gusta como suena. Tras eso, la historia continúa en La Mandrágora, un diminuto bar del centro de Madrid donde toca con regularidad. Lo hace acompañado por Javier Krahe, un artista y amigo del que siempre hablará bien. Al poco, llegará el disco Malas compañías (1980) y luego el mítico directo de La Mandrágora (1981).
Tal y como muestra el libro, Sabina se percata rápido de que el concepto “cantautor” debe actualizarse tras la muerte del dictador; que es necesario salir de ese viejo traje protestón y aburrido de guitarra de palo, tupida barba y pantalón de pana; que hay que vivir un nuevo tiempo de colores, celebrar más y quejarse menos, sin dejar de reivindicar, por supuesto. De esta guisa, llegarán discos como Ruleta rusa (1984), Juez y parte (1985) y En directo (1986).
De seguido, el turno para la creación de los discos que le encumbran, poco a poco, al número uno. Son los momentos de Hotel, dulce hotel (1987), El hombre del traje gris (1988) o Mentiras piadosas (1990), a los que siguen Física y química (1992) y Esta boca es mía (1994), llegando el final del libro hasta el disco Yo, mí, me, contigo (1996). Todos ellos, discos con singles que ya son parte del cancionero popular. También, tal y como se relata en el cómic, son los años donde se forja el mito de ese Sabina noctámbulo, canalla, poeta y bohemio.
Tras el riguroso guion de Los Kikes, con los que hemos conversado sobre su nueva obra, la magia del cómic la aportan una docena de dibujantes espectaculares que firman los diferentes capítulos que conforman las partes en que se divide la obra cronológicamente ordenada: Aneke, Sergio Silván, Ramone, Marina Cochet, Judit Crehuet, Alberto Peral, Rubén Uceda, Toni Solanes, Kepa de Orbe, Alejandro Merino, Alberto Muriel y Iosu Berriobeña.
¿Cómo ves la oferta de biografías en cómic sobre artistas patrios en el mundo editorial de aquí?
Este lanzamiento de Sabina, junto con las dos novelas gráficas anteriores, Fito. Y por supuesto la luna y El Gran Wyoming. Mil palos y ninguno al agua, viene precisamente a llenar un hueco en nuestro panorama: editar cómic biográfico de calidad sobre artistas autóctonos de primera línea. Para nosotros, es una forma de rendir homenaje a nuestra cultura popular, tanto a los artistas retratados como a los ilustradores, porque el nivel que hay por estos lares es increíble.
De Sabina hay mil, y mil más, anécdotas sobre su fama de noctámbulo, juerguista y mujeriego. ¿Todo eso queda reflejado en el libro que habéis publicado?
Por supuesto, es una imagen que él trasmitió de sí mismo en sus canciones, declaraciones y apariciones públicas durante años. Tenía que estar, pero no es el eje ni el leitmotiv del libro. Huimos del morbo y el amarillismo. El libro retrata su infancia, su juventud y el exilio en Londres, y se recrea en los entresijos de su carrera artística, así como en representar en cómic algunas de sus más emblemáticas canciones.
¿Cómo habéis conseguido que sea una obra autorizada? ¿Tenéis su visto bueno?
Pues con mano izquierda, paciencia, profesionalidad y suerte. No hay duda de que el invento le ha caído en gracia. Es cierto que la persona que le presentó el proyecto fue Leiva (es colega y, cuando le pedimos consejo sobre cómo entrar a Sabina, le gustó tanto la idea que nos pidió ser él mismo el que se la enseñara), lo cual ya era una garantía. Con su voz aguardentosa, al final del proceso, cuando le mandamos el bruto del libro ya acabado, envió al móvil un mensaje personal supercariñoso que hemos utilizado en la nota promocional: “Tengo mucho que decir a favor de este libro. Me sale del alma felicitar a Los Kikes y su equipo por el texto, los fantásticos dibujos y el trabajo de investigación. Hay cosas que se cuentan mejor de lo que yo recordaba entre sombras”.
Es muy destacable la relevancia que toman las canciones en cómic, cómo estas se integran en la historia, en el personaje.
Es que Sabina tiene una narrativa muy novelesca en muchas de sus canciones; las estrofas y estribillos se ven. Así que trasladarlo a viñetas ha sido algo muy agradecido. Hemos procurado, en las páginas que recrean canciones, no usar apenas la letra de la canción, pero el lector la va a reconocer enseguida, la va a poder cantar viendo las ilustraciones.
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de la vida de Sabina, ahora que eres un especialista en su vida y obra?
Me llamó mucho la atención aquella “gesta” suya de lanzar un cóctel molotov a una sucursal bancaria en su época de estudiante. El cómic intenta explicar bien todo el contexto cultural de aquellas protestas universitarias antifranquistas para entender bien las razones de aquella acción que le llevaría al exilio.
Sabina anuncia, ya por segunda vez, que se retira. ¿Crees que se va a retirar de verdad y que ya no sabremos más de él?
De las grandes giras, seguro que se retira. De hacer libros y discos, creo (confío) que no, que seguirá. Pues sabe más el diablo por viejo; y eso, trasladado a poemas y canciones, quisiera disfrutarlo.
• Título: Joaquín Sabina. Pasión y vida (Vol. 1)
• Autores guion: Kike Babas y Kike Turrón
• Editores: Mariano Remiro y Mikel Aguirre
• Ilustradores: Aneke, Sergio Silván, Ramone, Marina Cochet, Judit Crehuet, Alberto Peral, Rubén Uceda, Toni Solanes, Kepa de Orbe, Alejandro Merino, Alberto Muriel y Iosu Berriobeña
• Prologuístas: Luis García Montero y Benjamín Prado
• Encuadernación: Tapa dura (Cartoné)
• Páginas: 224 páginas
• Tamaño: 168×258 mm
• ISBN: 978-84-09-75947-7
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