Janire González-Etxabarri surfeando en una ola durante una competencia. © Pablo Jiménez. International Surfing Association.

Janire González-Etxabarri. Sueños sobre una ola

La joven vasca, Janire González-Etxabarri, se proclamó campeona del mundo de surf contra todo pronóstico en El Salvador.

Existe ya un instante que la surfista guipuzcoana, Janire González-Etxabarri, de 20 años, no olvidará en su vida. Ese día de septiembre en el que, al lado de su abuelo, se adentró en un pasillo de tablas de surf —esa “alfombra roja” tan particular de los surfistas y bodyboarders— para el recibimiento que le organizó Zumaiako Itzurun Surf Elkartea después de que ella se proclamara, ni más ni menos, que Campeona del mundo. Siempre recordará las proclamas de ánimo y las sonrisas de los muchos asistentes a ese homenaje. Centenares de personas acudieron a la cita en la Cofradía, donde su pueblo se concentró para aplaudir a la mejor del mundo en surf. “Aún no sé qué se siente al ser Campeona del mundo porque todavía no me lo creo”, dijo Janire. Y es que, cuando días antes llegó a El Salvador, lugar del campeonato, no se imaginaba que iba a volver con la medalla de oro colgando de su cuello.

Historia de emociones

Esta surfista empezó a coger olas desde muy pequeña con sus amigas en la playa de Itzurun (Zumaia). Poco a poco, se dio cuenta que este deporte era lo que más le gustaba en la vida. Por lo que fuera, se le daba bien. Desde entonces, entra en el agua casi todos los días de cada año y compite en las playas de muchos lugares del mundo. Hasta planifica las vacaciones según las playas para hacer surf. Sin duda, su favorita es la de Itzurun, donde empezó todo y donde fue cogiendo experiencia.

Lo ocurrido en septiembre es una historia de emociones y de esas sorpresas que da la vida a veces. Janire González-Etxabarri brilló más que nadie en el Mundial organizado por la ISA en El Salvador, en los World Surfing Games. Así, confirmó la magnífica temporada que había realizado este año. Se metió en la final disputada en La Bocana, playa que le gusta por su ola de izquierdas, y finalizó en el primer puesto, tras superar a grandes surfistas de la talla de la australiana Sally Fitzgibbons. Janire González-Etxabarri demostró así que es una de las referentes a nivel internacional. El surf vasco, siempre en primera línea, suma una figura más a su laureado palmarés. Pero, ¿cómo fue ese Mundial?

El Campeonato del Mundo

Janire empezó muy fuerte su segundo Mundial absoluto, aunque no aparecía entre las favoritas. Fue la mejor en la primera ronda y se impuso con holgura a la chilena, Rafaella Montesi, a la venezolana, Kellyani Flores, y a la húngara, Blanka Sebestyén. Obtuvo, con un 8.00, una de las mejores notas de la jornada. El asunto funcionaba sin presiones. Fue un presagio.

En la segunda ronda, volvió a lucirse y firmó una nota final de 14.10, muy por encima de las logradas por la salvadoreña, Julissa García, la filipina, Nilbie Blancada, y la canadiense, Catherine Bruhwiler. Sin embargo, todo tiene sus dificultades, y a Janire le costó superar la tercera ronda, pero no se desanimó. Finalmente, la pasó en segunda posición, por detrás de la peruana, Sol Aguirre, eliminando a la holandesa, Zoie Zietz, y a la ecuatoriana, Génesis Borja. La cuarta ronda dejó un emotivo duelo vasco entre Janire y Nadia Erostarbe, que se saldó a favor de la de Zumaia por solo 0.07 puntos. La vencedora de esta manga fue la portuguesa, Yolanda Sequeira, con una puntuación de 13.17, seguida por Janire González-Etxabarri, con 12.67, Nadia Erostarbe, con 12.60, y la brasileña, Sophia Medina, con 9.67.

La repesca

Janire continuó avanzando así en la competición principal del Mundial, aunque la favorita, Sally Fitzgibbons, se hizo con la serie en la siguiente eliminatoria, seguida por su compatriota, Ellie Harrison. Janire quedó relegada a la tercera plaza y la japonesa, Nanaho Tsuzuki, a la cuarta. A partir de ese instante, tuvo que seguir adelante en el Mundial por el camino de la repesca, la competición paralela que ofrece una segunda oportunidad a las surfistas en los campeonatos del Mundo de la ISA. La guipuzcoana demostró ahí que es una de esas deportistas a las que no le pesan las circunstancias adversas, como ya lo demostrara también en el Mundial de Puerto Rico, en el que casi todo su recorrido lo realizó en la repesca. En esta ocasión, tampoco se amilanó después de caer eliminada de la competición principal. En esa repesca, accedió directamente a la octava ronda, que superó como líder. Quedó por delante de Sol Aguirre y de la brasileña, Laura Raupp. El guion se repitió en la siguiente ronda de la repesca, la novena, en la que Janire fue la mejor, imponiéndose a Nanaho Tsuzuki, Sol Aguirre y a la estadounidense, Eden Walla. Así, la deportista vasca terminó la jornada clasificándose para la última ronda de la repesca, consciente de que, si superaba esa manga, entraría en la gran final del Mundial. Y lo hizo.

Cabalgando sobre la ola

El destino quiso que la serie de la décima ronda de la emocionante repesca fuera una copia de la celebrada en la quinta ronda de la competición principal. La veterana, Sally Fitzgibbons, volvió a ser la mejor y la pelea por la segunda plaza quedó entre Ellie Harrison y Janire. La australiana cabalgó una ola en los instantes finales de la serie y la vasca tuvo que esperar a esa nota para saber si estaría en la final o no. La guipuzcoana pasó con bastante margen.

Ya en la final, donde se enfrentó otra vez a la australiana, Fitzgibbons, a la peruana, Arena Rodríguez, y a la portuguesa, Yolanda Sequeira, Janire comenzó muy sólida en olas puntuadas con un 7.50 y un 7.07. Su constancia y fe la colocaron al frente de la manga una vez transcurridos tres minutos y ya nadie pudo quitarle el liderato. La zumaiarra ganó un 14 de septiembre de 2025 el Mundial, con una puntuación de 14.57, acabando por delante de Sequeira (13.57), Fitzgibbons (13.57) y Rodríguez (8.53). Sin creerse lo que había pasado, se fundió en un emotivo abrazo con su hermana, Annette, nada más salir del agua. Vivió el sueño más bonito. “Parece que es mentira, no parece que sea real. No pensaba en el oro, pensaba en ir ola a ola y demostrar mi surfing”, declaró la primera mujer española en vencer en los ISA World Surfing Games.

Una gran trayectoria

Este resultado se suma a la estupenda trayectoria de Janire González-Etxabarri, que fue campeona júnior de Europa a los 15 años. La joven surfista, laureada en categorías inferiores, compitió de forma continuada en las Challenger Series, tanto en 2024 como en 2025. En el circuito de las Qualifying Series, ha acumulado este año tres segundos puestos (Taghazout Bay, Lacanau Pro y Boardmasters Open), un quinto puesto (Ballito Open) y un séptimo (ABANCA Pantín Classic). En 2024, disputó su primer Mundial ISA absoluto, terminando en el puesto 15.º —aquello ya lo consideró un éxito—, y consiguió el billete para disputar sus primeros Juegos Olímpicos. En los Juegos de París, en la temida y peligrosa ola de Teahupo’o (Tahití), concluyó en el puesto 17.º.

Ha conseguido todos estos logros después de surfear de pequeña en Itzurun con sus amigas. Tras probar este deporte, sus amigas lo fueron dejando, pero a ella le gustaba cada vez más. Empezó a entrenar en Zarautz con Ibon Amatriain de manera más seria. Después, llegaron las primeras competiciones y le fueron bien. Y así hasta ahora. Suena bien, Campeona del mundo.

Texto: J. A. Pérez Capetillo • Fotos: International Surfing Association y Basque Team

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